LOS SISTEMAS DE INFORMACIÓN GEOGRÁFICA (SIG)
Las Tecnologías de la Información Geográfica (TIG), incluidas dentro de las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación), han supuesto un importante avance metodológico que ha beneficiado a la Arqueología, ya que, como hemos señalado en la página explicativa de la IDE, estudia las sociedades antiguas a través de elementos que poseen las características de materialidad y espacialidad. Las TIG, en este sentido, facilitan la integración del análisis espacial en los estudios arqueológicos, la interpretación del registro arqueológico, el estudio de patrones de conducta o el establecimiento de modelos predictivos.
Los Sistemas de Información Geográfica (GIS en su versión inglesa, Geographical Information Systems) se enmarcan dentro de los Sistemas de Información, conjunto de herramientas y métodos que permiten organizar, administrar y analizar grandes volúmenes de datos. Estos sistemas han adquirido gran relevancia poruqe nos permiten gestionar y acceder a grandes volúmenes de datos de una forma rápida y eficaz.
Los SIG se definen como “un conjunto de herramientas de análisis, integrados en una plataforma que permite la gestión, modificación, edición y consulta de bases de datos espaciales. Así, la principal característica, que los diferencia del resto de los Sistemas de Información, es su dimensión geográfica, al estar diseñados para “trabajar con datos georreferenciados mediante coordenadas espaciales o geográficas”, es decir, con geodatos” (Capdevila Montes y Mínguez García 2016: 23,24).
Los SIG poseen la capacidad de editar datos espaciales, y además suelen incluir una serie de facilidades o herramientas que permiten el trabajo con imágenes satélite, realizar cálculos estadísticos, realizar análisis espaciales, etc. El crecimiento de las Infraestructuras de Datos Espaciales (IDE) y los estándares OGC (Open Geospatial Consortium) ha revalorizado la importancia de los SIG. Sin embargo, y como sucede con cualquier aplicación, los SIG han de adaptarse al trabajo que estemos realizando siendo fundamental la planificación, la definición del objetivo del estudio y la concreción de qué se quiere analizar y cómo hacerlo.
Actualmente, existen muchas aplicaciones de escritorio que nos permiten trabajar con SIG, como por ejemplo ESRI, con ArcGIS, o Autodesk, creadores de AutoCAD, con Autodesk Map. Sin embrago, al ser estas opciones de pago, nosotros nos centraremos en otras aplicaciones de software libre. Entre las aplicaciones de software libre más utilizadas encontramos QGIS (Quantum GIS), desarrollado desde OSGeo (Open Source Geospatial Foundation) y que trabaja en combinación con Grass (Geographic Resources Analysis Support System), también mantenido por OSGeo, lo que nos permite el tratamiento de imágenes digitales y trabajo con archivos vectoriales. Otra aplicación de software libre muy interesante es GVSIG (Generalitat Valenciana Sistema de Información Geográfica) que gracias a su conexión con la biblioteca de herramientas sextante ha adquirido cada vez una mayor difusión y estabilidad.
Geodatos
Los datos espaciales, o geodatos, “son aquellos que están referenciados en el territorio y contiene una referencia espacial mediante coordenadas UTM, coordenadas geográficas (longitud y latitud), calle y número, sección censal, referencia catastral… También contiene otros atributos o componentes propios de la información geográfica (IG), como son el temático o el temporal, según a lo que se refiera y al momento al que se referencie el dato, respectivamente” (Capdevila Montes y Mínguez García 2016: 29).
Por tanto, los geodatos tienen tres dimensiones diferenciadas que se relacionan para representar la realidad: la espacial, la temática y la temporal (Gutiérrez Puebla y Gould 1994):
1. Dimensión espacial: se expresa mediante un sistema de coordenadas, dando una ubicación única para cada fenómeno. Además, se establecen relaciones espaciales y propiedades a cerca de cada ubicación.
2. Dimensión temática: toda información alfanumérica que se almacena en las tablas de datos asociadas a los objetos con representación geométrica.
3. Dimensión temporal: todos los datos, ya sean espaciales o temáticos, varían con el paso del tiempo. En el momento de su captura y publicación representan únicamente un instante concreto. Para mostrar variaciones temporales se puede recurrir a diversos métodos, como, por ejemplo, la colección de diversas capas que describan momentos específicos generando una serie temporal u otros métodos de representación como mapas animados o barras de deslizamiento.
REFERENCIAS
Capdevila Montes, E. y Mínguez García, M.C. (2016). Introducción a los Sistemas de Información Geográfica. En Manual de Tecnologías de la Información Geográfica aplicadas a la Arqueología, pp. 21-78, Madrid: Comunidad de Madrid, Museo Arqueológico Regional : Ilustre Colegio Oficial de Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras y en Ciencias de la Comunidad de Madrid.